En una olla o sartén grande, calienta el aceite a fuego medio-alto. Ya que esté caliente, añade el chorizo y cocina de 4 a 5 minutos, revolviendo de vez en cuando hasta que suelte la grasa y esté dorado. Añade el tocino, revuelve y cocina de 3 a 4 minutos, hasta que se empiece a dorar. Agrega los jitomates y los chiles poblanos, revuelve y cocina durante un par de minutos. Agrega los frijoles cocidos y todo el caldo, deja que hiervan y reduce el fuego a medio. Cocina de 7 a 8 minutos, hasta que los frijoles estén sazonados, todos los sabores se hayan mezclado y la grasa color rojo haya subido a la superficie. Apaga el fuego y espolvorea el queso desmoronado encima antes de servir.