Pon la carne en un recipiente grande y cúbrela con agua fría. Agrega el vinagre y 2 cucharaditas de sal y deja remojar de 20 a 30 minutos. Enjuaga bien la carne con agua fría.
Pon la carne enjuagada en una olla grande, cúbrela con al menos 3 litros de agua, agrega 4 cucharaditas de sal y revuelve. Calienta a fuego alto hasta que hierva activamente y luego reduce el fuego a bajo, quita la espuma que se haya formado en la superficie, tapa la olla y cocina durante 2 horas.
Calienta un comal o sartén pequeño a fuego medio-bajo. Cuando esté caliente, tuesta las hojas de aguacate, voltéalas y cocina durante un minuto más hasta que suelten el aroma.
Pon los chiles en una olla pequeña, cúbrelos con agua y calienta a fuego medio-alto. Hierve durante 10 minutos, hasta que los chiles se hayan rehidratado por completo. Pon los chiles en la licuadora junto con una taza del agua de cocción y licua hasta que tengas un puré suave.
Destapa la olla, agrega el puré de guajillo, revuelve y agrega las hojas de aguacate. Tapa la olla nuevamente y cocina durante 2 horas más, o hasta que la carne esté suave, jugosa y se separe fácilmente cuando insertes un tenedor.
Sirve la carne en platos hondos junto con el caldo. Pon en la mesa tortillas de maíz calientes, cebolla y cilantro picados y los limones partidos para armar tacos de birria acompañados del caldo, que se puede tomar antes o después de los tacos.