Precalienta el horno a 190 C. En un recipiente grande, bate la masa, la harina, el azúcar, el polvo para hornear, el bicarbonato de sodio y la sal. Haz espacio en medio y agrega 1⅓ tazas de crema espesa y revuelve para incorporar todos los ingredientes. Enharina la superficie donde vayas a trabajar y amasa la mezcla durante un minuto hasta que se integre completamente.