1/4de cucharaditade pimienta negra recién molida, más la necesaria para sazonar el pollo
2cucharadasde la salsa de chiles chipotle en adobo, o al gusto
1chile chipotle en adobo, semillas opcionales o al gusto, opcional
750gde muslos de pollo, sin piel ni huesos
1cucharaditade orégano seco
6cucharadasde aceite vegetal, divididas
500gde pasta corta o coditos
3tazasde caldo de pollo, casero o comprado
2tazas (210 g)de queso que se derrita, como Chihuahua, mozzarella, Oaxaca o Monterey Jack
1aguacate mexicano maduro partido a la mitad, sin semilla y la pulpa cortada en rebanadas, para acompañar
Crema mexicana, opcional para acompañar
To Prepare
Pon los jitomates y el ajo en una olla mediana (de 3 litros) y cúbrelos con agua. Calienta a fuego medio-alto y hierve durante unos 10 minutos, hasta que los jitomates estén bien cocidos y la piel se comience a separar. Pasa los jitomates, el ajo y 1/2 taza del agua de cocción a la licuadora. Una vez que se hayan enfriado un poco, añade la cebolla, 3/4 de cucharadita de sal, 1/4 de cucharadita de pimienta, la salsa de adobo, el chile chipotle si lo vas a usar, y procesa todo hasta obtener una salsa suave.
Espolvorea el pollo con el orégano, 1/4 de cucharadita de sal y la pimienta al gusto. Calienta 4 cucharadas de aceite en una olla o sartén grande y grueso a fuego medio-alto. Una vez caliente, sella los muslos de pollo de 2 a 3 minutos por lado hasta que se doren. Retira el pollo del sartén y aparta en un recipiente.
Vierte las 2 cucharadas restantes de aceite en la olla y calienta a fuego medio-alto. Una vez caliente, añade la pasta. Fríe la pasta durante unos minutos, revolviendo constantemente, hasta que se dore sin quemarse y huela a tostado. Vierte la salsa de tomate encima de la pasta. La salsa salpicará, por lo que puedes poner la tapa encima para que no te salpique. Revuelve, tapa la olla parcialmente y cocina la salsa durante unos 5 minutos, revolviendo ocasionalmente, hasta que oscurezca de color y se espese hasta parecer puré.
Pon el pollo entre la pasta, vierte el puré encima, revuelve con cuidado, tapa la olla y reduce el fuego. Cocina durante 25 minutos.
Precalienta el horno a 200 C.
Quita la tapa, espolvorea el queso encima de la pasta y pon la olla sin tapar en el horno. Hornea de 10 a 12 minutos, hasta que el queso se derrita por completo y comience a dorarse. Sirve caliente. Puedes acompañar con crema y rebanadas de aguacate. Corta la cazuela en rebanadas gruesas y sirve como si fuera pastel, ya que tendrá una capa dorada alrededor.