Con una batidora, bate el queso crema y la mantequilla a velocidad media hasta que la mezcla quede cremosa. Añade la harina y la sal y continúa mezclando por un minuto más. Pon la masa en una superficie enharinada y amasa por un minuto. Haz una bola con la masa, envuélvela en plástico y refrigérala de 15 minutos hasta 1 día.
En una superficie enharinada, extiende la masa hasta que tenga un grosor de .60 cm. Para empanadas medianas, haz círculos de 10 a 13 cm de diámetro hasta que te acabes la masa.
Engrasa una charola para hornear y precalienta el horno a 190 C.
Pon 1 1/2 cucharadas de picadillo en el centro de cada empanada y con una brocha, unta las orillas con el huevo batido. Dobla cada empanada presionando los bordes con los dedos y finalmente presiona con un tenedor las orillas para sellar bien cada empanadas.
Pon las empanadas en la charola para hornear y unta la superficie de cada una con el huevo batido usando la brocha; después, espolvorea encima el ajonjolí. Hornea las empanadas de 20 a 25 minutos o hasta que estén bien doradas y cocidas.
Para preparar el picadillo:
Calienta el aceite de oliva en un sartén grande a fuego medio-alto. Añade la cebolla y acitrona un par de minutos. Agrega el ajo y dora durante un minuto hasta que suelte el aroma. Incorpora la carne y la sal y cocina por unos 8 minutos, hasta que esté bien cocida.
Añade el puré de tomate y dóralo de 5 a 6 minutos, hasta que cambie de color y se espese. Agrega el caldo de pollo o agua, el comino, los clavos y la canela. Revuelve bien y cocina 15 minutos más.
Agrega las pasas, las almendras y las aceitunas, revuelve bien y sazona al gusto. Cocina 5 minutos más.
Recuerda que una vez que se enfríe, el picadillo se secará un poco al absorber todos los jugos. Puedes hacerlo dos días antes y refrigerarlo.