Pon las yemas, el huevo, la mostaza, el jugo de limón, la sal y la pimienta en la licuadora y licua a velocidad baja durante un minuto. Abre la tapa de la licuadora y añade lentamente los aceites en un chorro muy delgado hasta que se hayan incorporado todos los ingredientes. Pasa la mayonesa a un recipiente, agrega la salsa de los chipotles y revuelve bien. Puedes refrigerar la mayonesa que sobre hasta por una semana.