Precalienta un comal o sartén antiadherente a fuego medio-bajo. Tuesta los chiles durante unos 10 segundos por lado, sin quemarlos. Ponlos en un recipiente y agrega el agua hirviendo hasta cubrirlos. Deja remojar los chiles de 20 a 30 minutos hasta que se rehidraten, y luego licúalos con el agua, por partes si es necesario, hasta que obtengas un puré homogéneo y suave.
En un sartén grande, calienta el aceite a fuego medio-alto durante 1 ó 2 minutos, hasta que esté caliente. Añade la cebolla y acitrónala de 2 a 3 minutos. Añade el ajo y dora 1 minuto más. Agrega la flor de jamaica y cocina de 3 a 4 minutos, hasta que esté ligeramente crujiente.
Agrega las tortillas y cocínalas durante 1 minuto. Agrega las nueces, cocina 1 minuto más y luego añade el plátano macho y la ciruela pasa, revuelve y deja que se empiecen a dorar, de 2 a 3 minutos. Cada vez que agregas un ingrediente, deja que se comience a cocinar y a integrar antes de añadir el siguiente.
Añade el puré de los chiles y el caldo de pollo.
Una vez que toda la mezcle comience a hervir, añade el piloncillo, la canela, los clavos de olor y la sal. Baja el fuego a medio-bajo y cocina de 20 a 25 minutos. Por partes, licua la mezcla en la licuadora o la procesadora hasta obtener una salsa tersa. Sirve el mole encima de la carne, pollo o mariscos cocidos que te gusten.