En una olla mediana, pon a hervir los jitomates con el ajo y el laurel a fuego medio-alto unos 10 minutos, o hasta que estén totalmente cocidos. Retira el laurel y licúa muy bien los jitomates y el ajo.
En un sartén grande y grueso, calienta el aceite a fuego medio. Acitrona la cebolla de 4 a 5 minutos. Añade las rajas y cocina durante 1 ó 2 minutos más. Después, agrega la salsa de tomate, la mejorana, la sal y pimienta y deja que se espese de 10 a 12 minutos más. Puedes hacer esta salsa antes y refrigerarla hasta por 4 días.
Cuando prepares los huevos, calienta la salsa a fuego medio-bajo y añade los huevos uno por uno. Es más fácil si rompes los huevos en una taza primero. Pon un poco de sal a cada uno y tapa el sartén, dejando que los huevos se cuezan totalmente. A mí me gusta la yema tierna, lo que toma de 4 a 5 minutos.
Sirve con queso encima y tortillas calientitas o pan tostado.
Lo que más me gusta de este platillo, es que puedes hacer la salsa antes y preparar todo justo cuando lo vayas a servir.